Finito de Córdoba ha cuajado una sensacional actuación en Xátiva. Toda la tarde muy dispuesto y en maestro ha cortado tres orejas y ha abandonado a hombros el coso valenciano.En su primero, al que ha toreado de manera extraordinaria de capote, ha ejecutado una faena que ha aunado saber y sabor, inteligencia y clase, calidad y belleza. Cumbre de toreo bueno.
El de Jaralta, bravo y noble, aunque medido de fuerza, ha requerido de un inicio de faena muy a su favor para afianzarlo y poder alargar su duración y su entrega. Así, los primeros muletazos por el derecho, a media altura, han sido el preludio de varias tandas rotundas, encajadas y rebosantes de empaque, roto el torero y entregado el toro, en un trasteo siempre a más que ha hecho las delicias del público valenciano. Al natural más de lo mismo, dos series despaciosas, de muletazos soberbios rematados por debajo de la pala del pitón para terminar de exprimir al de Jaralta, en una obra rematada a la altura de su calado, con un toreo a dos manos de mucha plasticidad. Dos orejas de peso, el peso que da una faena de tanta categoría.
Una más ha cortado al quinto, tras una labor entregada y dispuesta, ante un toro de menor nota que el anterior, al que ha toreado con gusto en redondo, culminando una tarde importante, con el sello inconfundible del maestro Fino.
