jueves, 11 de octubre de 2007

SIN SUERTE PARA EL FINO

Tarde de poco fuste en Zaragoza para Finito de Córdoba. Ante dos oponentes que no se han prestado para el excesivo lucimiento, Juan Serrano ha realizado a su primero una faena con varios muletazos largos y templados pero faltos de emoción ante la sosería del animal. En el segundo, al que se le ha pegado mucho en un largo primer puyazo, la faena no ha llegado a tener pasajes de interés ya que el toro ha llegado muy parado a la muleta. Sobró ese largo puyazo, aunque bien es cierto que en los capotes tampoco había mostrado el astado una embestida franca. Y otra cosa bien cierta es que El Fino no ha contado con el material más propicio en su lote. Así, y respetando todos los matices que cada uno quiera añadir, lo he visto yo.

Del resto de la tarde, destaco la disposición de El Juli ante un lote también poco propicio y con el que pudo tocar pelo de haber manejado con acierto los aceros. El Fandi contó con un primer toro de gran calidad al que banderilleó y toreó a placer, en mi opinión con menos reposo del que la templanza del toro requería. Cortó una oreja. En su segundo, un toro con movilidad y emoción en los primeros tercios, formó un alboroto con los palos, estando a punto de llevarse una cornada pero poniendo la plaza bocabajo. Mantuvo el tono en el inicio con la muleta, comenzando de rodillas e instrumentado un buena serie con la derecha. De mitad de faena en adelante el toro bajó el tono y a partir de ahí el torero se empeñó en hacerlo pasar y mantener alta la temperatura de los tendidos, para culminar con una estocada hasta el puño y un descabello. Otra oreja de total justicia, una justicia que no hubiesen tenido las dos que se le pedían. Bien El Fandi y bien el presidente.