Nunca es suficiente todo aquello que se pueda hacer a beneficio de una causa necesitada, como era el caso que nos congregaba ayer en el Campo Municipal de La Carlota: La Fibromialgia. Sus consecuencias y quienes las padecen convivirán todo el año, por lo que este acto supone un granito de arena, siempre necesario, aunque como he señalado antes nunca suficiente, ni para esto ni para cualquier otra cuestión que en estas fechas se aborda.
Dicho esto, y antes de entrar en materia, vaya desde aquí mi más sincero y cariñoso aplauso para esta iniciativa de Juan Plata y Alicia Rosado, que apoyados en varias firmas colaboradoras, pero sobre todo en su esfuerzo y dedicación por sacar este acto adelante, lograron reunir ayer a un buen puñado de toreros y miembros de la prensa taurina sobre el magnífico terreno de juego del Municipal carloteño.
Nada más llegar nos enterábamos de la coincidencia en fecha y hora con el partido de dos actos deportivos populares en esta localidad, ambos con gran tradición y seguimiento, lo cual sin duda alguna restó mucho público al evento. Una pena. Pero dejando a un lado las lamentaciones, otro aplauso para todos los que acudieron y colaboraron con la causa, y mucho ánimo para Juan y Alicia con el objetivo de que el próximo año repitan la experiencia, convirtiéndola poco a poco en tradicional, consiguiendo así más apoyo para cada edición.
De lo puramente futbolístico hay que comenzar destacando la sensacional mañana que nos acompañó en lo climatológico para la práctica deportiva, y la lógica diferencia, sobre todo física, entre ambos equipos, algo que desde un principio decantó la balanza en favor de los "coletas".
El equipo de toreros, liderado por Finito de Córdoba, que desde el primer momento cogió la batuta en el centro del campo, con un toque y una calidad superior, contaba en sus filas con auténticos "puñales" en las bandas, como Paquito Gómez, muy incisivo en todo el partido, así como con un delantero de lujo, Rafael González "Chiquilín", que dio muestras de exquisita clase en el área. Atrás, Andrés Luis Dorado y Juanma Arjona hacían valer su físico, así como Sergio Sanz y Curro Jiménez, en la medular, auténticos motores para el equipo. Las jóvenes promesas de nuestra provincia, "Gallo Chico", Iván de Aguilar, "El Zorro", Mazzantini y Rafael Reyes completaban un plantel muy superior durante todo el partido, que contó también con el "refuerzo" de los hermanos Pineda, José Luis y Diego, uno arriba de auténtico depredador del área y otro bajo palos, evitando que el resultado fuese algo más honroso para la prensa. Del mismo modo, Joaquín Mata, torero de corazón, hacía suya la banda derecha con galopadas prodigiosas.
Entre los informadores, muchas ganas y también, porque no, varios apuntes de calidad. Empezando por la portería, cabe señalar la voluntariosa actuación de Ladis que hizo rugir a la grada cuando respondió, cual gato montés, con una portentosa estirada a un remate de Finito de Córdoba en el interior del área. En la segunda parte, un entonado Rafa Cobo poco pudo hacer por evitar que los goles siguieran cayendo, pero impidió un resultado más abultado. En defensa, Alejandro Rodríguez, Salvador Giménez y Juan Antonio Jiménez, que terminó de extremo, pusieron todo de su parte para evitar lo inevitable, aún así nos dejaron muestras de su voluntad, que no es poco con lo que había delante. Rafa Sánchez Pineda también hizo lo que pudo, queriendo emular por momentos al mítico Rafael Gordillo por el carril izquierdo y dejando, eso sí, un rendimiento muy por encima de lo esperado, sobre todo por él mismo. Fue sustituido por un no menos voluntarioso Juan Plata. La calidad y el buen fondo físico la puso Víctor Molino, que hizo goles y repartió asistencias, contando con la ayuda de José Luis Día en el apartado goleador. Y un servidor, que hoy apenas puede moverse víctima de las dolorosas agujetas, también hizo lo que pudo, que no era mucho, entre otras cosas fallar un penalty cuando nuestro equipo remontaba.
Al final, y según algunos que llevaron la cuenta, fue más o menos 12 a 6 el marcador resultante de un encuentro en el que reinó la deportividad y el buen humor, incluida una entrada en Juan Romero "El Zorro" a su mozo de espadas, Rafael Sánchez Pineda, que lo hizo rodar por los suelos. Todo quedaba en casa.
En la entrega de premios se reconoció la calidad y el buen hacer futbolístico de Finito de Córdoba, mostrada en ambos conjuntos, ya que en la segunda parte jugó en el equipo de la prensa, siéndole otorgado el trofeo al Mejor Jugador del partido. El maestro recogió la distinción acompañado de un jovencísimo aficionado, al cual regaló el trofeo. También fue distinguida la faceta goleadora de Rafael González "Chiquilín", en el equipo de los toreros, y de Víctor Molino, en el conjunto de la prensa, momento que fue aprovechado para recordar al grandísimo aficionado que fue su padre, Manolo Molino, tristemente fallecido hace poco más de un mes. También hubo premio para el jugador más joven del partido, que con mucha diferencia fue Rafalito Rodríguez, hijo de Ladis, con un trofeo que el chaval recogió con gran ilusión. Estos premios fueron entregados por directivos y enfermos de la Asociación de Afectados por la Fibromialgia, así como por una representante del consistorio municipal.
Lo dicho, ojalá que el año que viene por estas fechas nos encontremos nuevamente, con idéntico éxito deportivo y con un muy superior éxito económico y de público. Enhorabuena a los participantes, mejoría y calidad de vida para los enfermos y "chapeau" para la organización.
Fotos: Alicia Rosado y Sánchez Pineda.