miércoles, 15 de septiembre de 2010

GRAN TOREO DEL FINO EN PIEDRABUENA

Finito de Córdoba ha cortado una oreja en el festejo celebrado esta tarde en la localidad manchega de Piedrabuena. No obstante, y por encima de la reseña, el toreo desplegado por el maestro en las dos faenas realizadas a su lote de Hnos. Tornay ha rayado a una altura superior, por clase, calidad y estética.


Su primero, un animal muy protestado de salida por falta de fuerzas, no le ha permitido el toreo a la verónica ligado, destacando, no obstante, algún lance suelto de enorme gusto. Sin embargo, con la franela ha instrumentado muletazos de enorme belleza y gran profundidad por ambos pitones, después de afianzar al animal en los primeros compases, para terminar toreándolo al natural muy abajo y muy largo.


La frialdad inicial del público, unida a las protestas por la flojedad del toro y también la colocación de la media estocada dejada por El Fino, han reducido el premio de su buena actuación a una ovación.


Ante el cuarto, que no ha hecho cosas buenas en los capotes, aunque ha tenido la virtud de humillar, el maestro ha dado una gran dimensión, apostando y cuajando al de Tornay en una faena de mucho temple, hondura y sentimiento.



Fenomenales los muletazos por el lado derecho, el pitón más potable del toro, largos y preñados de estética, y varios naturales, exquisitos y suaves.


Lástima que el toro no ha doblado tras media estocada en buen sitio, teniendo el maestro que hacer uso del descabello hasta en dos ocasiones. La oreja, aunque sea lo de menos después del ver torear así, ha sido de mucho peso.

Fotos: Julio César Sánchez.