martes, 16 de septiembre de 2008

FINITO INDULTA UN TORO EN TORRALBA DE CALATRAVA (CIUDAD REAL)

El maestro Finito de Córdoba ha vuelto a escribir esta tarde una nueva página de oro en su trayectoria, con el indulto del toro Desafiador, nº 56, de la ganadería de Antonio Bañuelos. El acontecimiento ha ocurrido en el coso manchego de Torralba de Calatrava, donde el Fino ha entrado en el festejo sustituyendo a Rivera Ordóñez, que se encuentra lesionado.

Disfrutemos de esta nueva gran noticia que nos ha deparado nuestro torero esta temporada. Son tres ya los indultos, tras el de Marbella y Constantina, haciendo un total de dieciocho como matador de toros. ¡Enhorabuena maestro!

CRÓNICA (Lanza Digital)

El otro protagonista de la tarde fue Finito de Córdoba, quien entró en el cartel sustituyendo a Rivera Ordóñez. ¡Qué suerte tuvimos! Debo confesar que personalmente prefiero antes casi a cualquier torero antes que a Rivera Ordóñez, pero si además nos ponen a Finito y éste indulta un nuevo toro en nuestra provincia, miel sobre hojuelas. Si no me equivoco el de ayer es el décimo octavo toro que indulta en su vida. No está mal. Además, este torero tiene una clarividencia innata deslumbrante. Vio al toro muy pronto, desde el buen saludo por verónicas, al que salió picado por la faena de Vázquez. Luego, ante una lidia poco acertada, fue él mismo quien lo lidió en banderillas y quien improvisó un vistoso quite.

El toro humilló mucho en los dos primeros tercios y Fino lo vio claro. Dando mucha importancia a todo lo que hacía, adornándose él y adornando al toro, con muletazos sin terminar de bajar la mano, pero de su indudable clase y estética por ambos pitones, la gente se fue calentando, y ayudada también por el torero, todo hay que decirlo, finalmente se perdonó la vida al toro.

En honor a la verdad debo reconocer que tengo mis dudas acerca de si el toro mereció el semejante premio o no, ya que en la fase final de la faena le costó más arrancar y siempre tuvo cierta querencia a la zona de sol, pero tampoco deja de ser verdad que el indulto de un toro bravo, y éste lo fue, engrandece la Fiesta y nos da argumentos para su defensa frente a los no pocos detractores con los que cuenta.