martes, 22 de abril de 2008

Y LA CONCLUSIÓN ES...

Después de la "Batalla de la Monumental" librada el domingo entre José Tomás y El Juli, y leídas ya la mayoría de las crónicas, está claro que todos dan por ganador al de Velilla, aunque puntualizando en lo devaluado del enfrentamiento por el mal juego de los toros. En esas mismas crónicas, como era de esperar, se da escasa cobertura a la actuación de Finito de Córdoba en la misma corrida. Es cierto que quedó inédito en el primero, y que en su segundo tuvo opciones hasta donde duró el toro.

De todas formas, y metiendo a críticos y público en el mismo saco, yo me pregunto que es lo que se hubiese escrito o valorado si el lucimiento hubiese sido mayor. Seguramente, y atendiendo a los precedentes existentes en la temporada pasada, el calado no habría diferido en demasía.

Hace un tiempo, publiqué un post en el que expresaba mi opinión sobre la presencia de Finito abriendo cartel a José Tomás, atendiendo a lo sucedido en las tardes que había compartido hasta entonces (AQUÍ). De igual forma, propuse una encuesta en la que la mayoría vio como positivo que Juan siguiera prodigándose bastantes tardes con el de Galapagar.

Pues bien, independientemente de lo que pasó o pudo pasar el domingo, mi opinión sigue siendo la misma, y hoy me encuentro con un artículo publicado en Burladero.com por Daniel Hernanz, en el que se refiere a la figura del "torero telonero", del que dejo aquí un párrafo que comparto en su totalidad, no por la corrida del domingo, la cual no presencié, sino por varias de las anteriores que si he visto, y por lo que vaticino que puede seguir ocurriendo.

La situación, asumida ya por casi todos, tiene también sus efectos perversos. Se vio el pasado domingo en Barcelona, en el duelo José Tomás-Juli, donde no sirviendo la corrida para sustentar la deseada lucha de fuerzas entre ambos, fue Finito quien dejó algunos de los mejores lances y muletazos del gris festejo sin que estos cobraran apenas relieve. Más al contrario, el tendido de la Monumental, amable y bueno como él solo, parecía meter prisa al torero nacido en Sabadell para que cuanto antes dejara paso a Tomás y Juli. Es el ‘telonero' muchas veces, el blanco perfecto donde descargar las iras cuando las cosas no ruedan.